Hoy en el blog, recordaremos a uno de las mejores selecciones que el fútbol dio, pero que nunca logro ganar una Copa Mundial, a pesar de ser el gran favorito en muchas ocasiones.
Antes del conocido "tiqui-taca" del Barcelona de Guardiola, o el "fútbol total" practicado por la Holanda de Rinus Michels, hubo un equipo que encanto al mundo con su estilo de juego particular, único en aquellos años, mostrando un fútbol de espectáculo que agradaba tanto al publico de Hungria como a los extranjeros. Durante la década del 50, un grupo formado por jugadores espectaculares como Puskas o Czibor y entrenados por un fenómeno como Sebes empezó a jugar un fútbol nunca antes visto y mantuvo un record de 32 partidos sin conocer la derrota.
El primer torneo importante que los "Magiares mágicos jugaron, fueron los Juegos Olímpicos de Helsinki de 1952. En la ronda previa, el equipo de Sebes tuvo de rival a Rumanía pero con goles de Czibor y Kocsis vencieron 2-1. En la siguiente ronda tuvieron de rival a la difícil Italia (que ya les había quitado un titulo mundial en el 1938), pero el marcador fue 3-0 para los húngaros con dos goles de Palotás y uno de Kocsis. En los Cuartos de Final, el rival sería Turquía, y los húngaros no tendrían problema para golear 7-1 al equipo turco con goles de Palotas, dos de Kocsis, Lantos, dos de Puskas y uno de Bozsik. En la semifinal, ante Suecia, el resultado no variaría mucho, y los dirigidos por Sebes humillarían por 6-0 a los suecos con dos goles de Kocsis y goles de Puskas, Palotas, Hudegkuti y autogol de Lindh. En el partido decisivo por la medalla de oro, Hungría le ganaría 2-0 al equipo yugoslavo con goles de Puskas y Czibor. El equipo dirigido por Sebes, logro su primera medalla de oro en fútbol de su historia y se gano el respeto del mundo del fútbol Ese año, recibió una invitación del seleccionado inglés para jugar en el mítico Wembley un amistoso en el año siguiente.
Para varios periodistas ingleses, fue el partido del siglo. Hungría llevaba en fila 23 partidos seguidos ganando, mas la medalla de oro conseguida en Helsinki el año anterior. El partido pretendía ser un partido parejo, con Inglaterra con ventaja por la localía y por lo que significa Wembley para el fútbol en aquel tiempo. El equipo entrenado por Sebes entro a la cancha con su típico 2-3-3-2 y mostró porque su selección era la mejor del mundo. Hungría paseo literalmente a Inglaterra en su propia cancha ante 100000 hinchas, y mostró que el juego inglés no era nada comparado con el enorme poder ultraofensivo de los húngaros El marcador de 3-6 a favor de los "magiares mágicos" por muchos años rondo en la mente de los británicos que no podían creer que en el mítico Wembley fueran humillados ante un equipo infinitamente superior. Nunca antes, una selección les había ganado en Wembley. Los tres goles de Hudegkuti, los dos goles de Puskas y el gol de Bozkis sirvieron para que Inglaterra se rindiese a los pies de Hungría y que jugadores como Tom Finney admitieran que "fue la mejor selección nacional con la que habían jugado en su vida" o que jugadores como el mítico Sir Stanley Mattews llamara a los húngaros como "la mejor selección de todos los tiempos". Inglaterra tiempo después pidió una revancha esta vez jugada en Budapest, pero el marcador no mejoraría y se llevarían un 7-1 en contra.
Con los Juegos Olimpicos de 1952 conseguidos y siendo la primera selección en ganarle a Inglaterra en Wembley, Hungría llegaba como la gran candidata para ganar la Copa Mundial de 1954 en Suiza. El equipo húngaro clasifico al mundial sin jugar un partido previo, ya que Polonia, su rival en las Clasificatorias, se retiro antes de tiempo y le dio el cupo directo al equipo de Sebes. En la Copa Mundial, tuvo de rivales a Alemania Federal, Turquía y Corea del Sur. El equipo de Hungría solo jugo 2 partidos en la fase grupal, pero no tuvo problemas para conseguir los 4 puntos (recordar que antes la victoria solo daba 2 pts, no como ahora que da 3) goleando 9-0 a Corea del Sur y 8-3 a Alemania Federal. En los cuartos de final, el equipo húngaro tenia que jugar ante el seleccionado de Brasil, quién todavía seguía con la espina clavada por el conocido "Maracanazo" en el Mundial de 1950. El partido fue simple para Hungría que venció 4-2 al equipo sudamericano con goles de Hidegkuti, Lantos y dos de Kocsis. En la semifinal, el conjunto de Hungría tuvo que volver a enfrentarse a un equipo sudamericano, esta vez, Uruguay, que era el actual campeón del mundo. El partido fue parejo y al final de los 90 minutos el marcador fue de 2-2. Pero en el alargue, Hungría marcaría dos goles mediante Kocsis y clasificaría a la final del Mundial. El rival de la final sería Alemania Federal, rival al que humillaría en la fase de grupos por 8-3. En la final, el fenómeno Puskas no llego al 100%, ya que tuvo una lesión al tobillo en el partido ante los "charruas", pero de igual manera jugo la final como titular. Antes de la final, Hungría y Alemania tenían 25 y 22 goles respectivamente marcados en las fases previas, hasta el día de hoy, ningún otro equipo ha hecho tantos goles como aquellos dos en un solo Mundial. La final partió excelente para Hungría que en 8 minutos ya iba ganando 2-0 en Berna con goles de Puskas y Czibor. Sin embargo, 10 minutos mas tarde, Alemania Federal recupero la diferencia de dos goles y empataría el partido. Cuando quedaban 6 minutos para el final, Rahn marco el 3-2 definitivo para los alemanes quienes ganaría el partido y de paso, su primer mundial. Para el mundo, esa final quedo como el "Milagro de Berna" y le sirvió a la sociedad germana como aliento para seguir adelante después de la posguerra. Luego de aquel histórico partido, Puskas declaro a la prensa que ellos fueron "los campeones morales".
La mágica selección de Hungría tendría su fin en el 1956, con la conocida "Revolución Hungara" en plena Guerra Fría Muchos de los jugadores importantes de esa selección se nacionalizarían de otros países como Puskas que se nacionalizo español o Kocsis que haría lo mismo. Otro gran jugador como Czibor se iría a jugar a la AS Roma y tiempo después al FC Barcelona y no volvería más a su selección. Después de aquella selección mágica, Hungría ganaría dos medallas de oro mas pero no lograría ningún campeonato importante. Desde México 1986, Hungría no vuelve a clasificar a un mundial.
Antes del conocido "tiqui-taca" del Barcelona de Guardiola, o el "fútbol total" practicado por la Holanda de Rinus Michels, hubo un equipo que encanto al mundo con su estilo de juego particular, único en aquellos años, mostrando un fútbol de espectáculo que agradaba tanto al publico de Hungria como a los extranjeros. Durante la década del 50, un grupo formado por jugadores espectaculares como Puskas o Czibor y entrenados por un fenómeno como Sebes empezó a jugar un fútbol nunca antes visto y mantuvo un record de 32 partidos sin conocer la derrota.
El primer torneo importante que los "Magiares mágicos jugaron, fueron los Juegos Olímpicos de Helsinki de 1952. En la ronda previa, el equipo de Sebes tuvo de rival a Rumanía pero con goles de Czibor y Kocsis vencieron 2-1. En la siguiente ronda tuvieron de rival a la difícil Italia (que ya les había quitado un titulo mundial en el 1938), pero el marcador fue 3-0 para los húngaros con dos goles de Palotás y uno de Kocsis. En los Cuartos de Final, el rival sería Turquía, y los húngaros no tendrían problema para golear 7-1 al equipo turco con goles de Palotas, dos de Kocsis, Lantos, dos de Puskas y uno de Bozsik. En la semifinal, ante Suecia, el resultado no variaría mucho, y los dirigidos por Sebes humillarían por 6-0 a los suecos con dos goles de Kocsis y goles de Puskas, Palotas, Hudegkuti y autogol de Lindh. En el partido decisivo por la medalla de oro, Hungría le ganaría 2-0 al equipo yugoslavo con goles de Puskas y Czibor. El equipo dirigido por Sebes, logro su primera medalla de oro en fútbol de su historia y se gano el respeto del mundo del fútbol Ese año, recibió una invitación del seleccionado inglés para jugar en el mítico Wembley un amistoso en el año siguiente.
Para varios periodistas ingleses, fue el partido del siglo. Hungría llevaba en fila 23 partidos seguidos ganando, mas la medalla de oro conseguida en Helsinki el año anterior. El partido pretendía ser un partido parejo, con Inglaterra con ventaja por la localía y por lo que significa Wembley para el fútbol en aquel tiempo. El equipo entrenado por Sebes entro a la cancha con su típico 2-3-3-2 y mostró porque su selección era la mejor del mundo. Hungría paseo literalmente a Inglaterra en su propia cancha ante 100000 hinchas, y mostró que el juego inglés no era nada comparado con el enorme poder ultraofensivo de los húngaros El marcador de 3-6 a favor de los "magiares mágicos" por muchos años rondo en la mente de los británicos que no podían creer que en el mítico Wembley fueran humillados ante un equipo infinitamente superior. Nunca antes, una selección les había ganado en Wembley. Los tres goles de Hudegkuti, los dos goles de Puskas y el gol de Bozkis sirvieron para que Inglaterra se rindiese a los pies de Hungría y que jugadores como Tom Finney admitieran que "fue la mejor selección nacional con la que habían jugado en su vida" o que jugadores como el mítico Sir Stanley Mattews llamara a los húngaros como "la mejor selección de todos los tiempos". Inglaterra tiempo después pidió una revancha esta vez jugada en Budapest, pero el marcador no mejoraría y se llevarían un 7-1 en contra.
Con los Juegos Olimpicos de 1952 conseguidos y siendo la primera selección en ganarle a Inglaterra en Wembley, Hungría llegaba como la gran candidata para ganar la Copa Mundial de 1954 en Suiza. El equipo húngaro clasifico al mundial sin jugar un partido previo, ya que Polonia, su rival en las Clasificatorias, se retiro antes de tiempo y le dio el cupo directo al equipo de Sebes. En la Copa Mundial, tuvo de rivales a Alemania Federal, Turquía y Corea del Sur. El equipo de Hungría solo jugo 2 partidos en la fase grupal, pero no tuvo problemas para conseguir los 4 puntos (recordar que antes la victoria solo daba 2 pts, no como ahora que da 3) goleando 9-0 a Corea del Sur y 8-3 a Alemania Federal. En los cuartos de final, el equipo húngaro tenia que jugar ante el seleccionado de Brasil, quién todavía seguía con la espina clavada por el conocido "Maracanazo" en el Mundial de 1950. El partido fue simple para Hungría que venció 4-2 al equipo sudamericano con goles de Hidegkuti, Lantos y dos de Kocsis. En la semifinal, el conjunto de Hungría tuvo que volver a enfrentarse a un equipo sudamericano, esta vez, Uruguay, que era el actual campeón del mundo. El partido fue parejo y al final de los 90 minutos el marcador fue de 2-2. Pero en el alargue, Hungría marcaría dos goles mediante Kocsis y clasificaría a la final del Mundial. El rival de la final sería Alemania Federal, rival al que humillaría en la fase de grupos por 8-3. En la final, el fenómeno Puskas no llego al 100%, ya que tuvo una lesión al tobillo en el partido ante los "charruas", pero de igual manera jugo la final como titular. Antes de la final, Hungría y Alemania tenían 25 y 22 goles respectivamente marcados en las fases previas, hasta el día de hoy, ningún otro equipo ha hecho tantos goles como aquellos dos en un solo Mundial. La final partió excelente para Hungría que en 8 minutos ya iba ganando 2-0 en Berna con goles de Puskas y Czibor. Sin embargo, 10 minutos mas tarde, Alemania Federal recupero la diferencia de dos goles y empataría el partido. Cuando quedaban 6 minutos para el final, Rahn marco el 3-2 definitivo para los alemanes quienes ganaría el partido y de paso, su primer mundial. Para el mundo, esa final quedo como el "Milagro de Berna" y le sirvió a la sociedad germana como aliento para seguir adelante después de la posguerra. Luego de aquel histórico partido, Puskas declaro a la prensa que ellos fueron "los campeones morales".
La mágica selección de Hungría tendría su fin en el 1956, con la conocida "Revolución Hungara" en plena Guerra Fría Muchos de los jugadores importantes de esa selección se nacionalizarían de otros países como Puskas que se nacionalizo español o Kocsis que haría lo mismo. Otro gran jugador como Czibor se iría a jugar a la AS Roma y tiempo después al FC Barcelona y no volvería más a su selección. Después de aquella selección mágica, Hungría ganaría dos medallas de oro mas pero no lograría ningún campeonato importante. Desde México 1986, Hungría no vuelve a clasificar a un mundial.
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